Pinka/Flush había estado vivo, ahora estaba muerto. Deprimida puso piedras en los bolsillos de su abrigo

Según Virginia Woolf su perrita Cocker Spanial era un ángel de luz, la llamó Pinka y tenía su rutina. Por las mañanas daba la vuelta en Tavistock Square Gardens, Londres. Ya después el día podía comenzar. Ay Pinka, te convertiste en Flush , el perro del libro que leí en clase de literatura. Una biografía del perro de Elizabeth Browning , la poetisa. A ver, Virginia Woolf es la escritora famosa británica del vanguardismo moderno del siglo XX y del feminismo internacional. Es la que escribió La señora Dalloway (1925), y el ensayo Una habitación propia con aquella famosa frase «Una mujer debe tener dinero y una habitación propia si va a escribir ficción» , uno de los textos más citados del movimiento feminista. Como Pinka, Flush tiene pensamientos humanos, pero como perro que es, siempre feliz de tirarse junto a la poetisa, siempre a su lado. Así como Colmillo conmigo y como Tachito antes. El Flush baila en las praderas y es el personaje más fresco de los libros de Woolf,