Monumentos, Anti-monumentos y Nueva Escultura Pública, curaduría desastrosa

Parte I - Amnesia

Dos días seguidos estuve en el Museo del Chopo -hermosa estructura de hierro al estilo Jugendstil alemán en Santa María la Ribera-, con dos amigas de hace muchos años, Perla Krauze y Magdalena (Mac) Zavala, una es artista la otra funcionaria pública. Nada que ver, aunque ambas auténticas, exigentes y concentradas en su trabajo. Perla quería ver el anti-monumento o Unmonumental art, interesada en la diferencia entre escultura pública y espacio público. Mac se entusiasmó porque la escultura es “su mero mole”. 

A Perla: Le gustó la instalación de Tercerunquinto de fotografías, dibujos y video, curiosamente titulada “Escultura pública…”, que en realidad se trató de un espacio público o anti-monumento; era la documentación de una plancha de concreto que los artistas pusieron en la periferia urbana de Monterrey donde la comunidad se apropió de “lotes” delimitados para diferentes usos: reuniones políticas o religiosas o sencillamente lugares improvisados para vender cualquier cosa o hasta hacer un refugio propio con refrigerador y todo.

Esta pieza sí, la de Tercerunquinto es la que más nos gusta. –Pues porque sí, dice Krauze y digo yo, sí, aunque es una pieza del 2006, exhibida ya en varios espacios.

Tercerunquinto (Gabriel, Rolando y Julio) son historia de la galería nina menocal. Eran un hueco de arte por donde yo me deslizaba para llegar al otro lado hasta el horizonte de las maravillas de los Terceros. No vamos a olvidar el Art Basel Miami Beach de 2002 en su primera edición –ese sí que fue bueno, no la vulgaridad de feria en la que se ha convertido hoy- en que Tercerunquinto en exhibición paralela a la feria rompió las paredes del Instituto Cultural de México en Miami. Para  realizar la atrevida instalación “Mexico, Sensitive Negotiations”, curada por Taiyana Pimentel y producida por la galería a través de la Secretaria de Relaciones Exteriores (el canciller Jorge Castañeda gracias a Dios). 

-¿Qué quieren derribar el muro del Instituto? 

- Así es, seremos la sensación de Art Basel en Miami, contesté y Taiyana explicó y "actuó" el concepto midiendo metros con pasos largos, ahora la línea en vertical, ahora a la izquierda en horizontal, para simular el espacio que ganaría la exhibición al integrar Instituto con Consulado. 

-¿Cuánto necesitan?

- Cien, dice Taiyana sin el menor titubeo. Yo me escondo detrás del Sofá. Estábamos en el despacho del Secretario de Asuntos Exteriores y era el año 2001, recordemos que Art Basel Miami Beach, la feria contemporánea más deslumbrante que se vería en Estados Unidos, iba a abrir ese año, pero por el 9 -11 de las Torres Gemelas, se recorrió al 2002.

- Doctor Estrada, Sarukhán ¿se ocupan del presupuesto y lo que piden Nina y la curadora ...

En Miami rompimos un muro a martillazos, el ruido mataba. Unimos el espacio para trámites del Consulado General de México con el espacio de exhibición del Instituto. Tanto el púbico que llegaba al consulado, muy asombrado, como los burócratas –atónitos-, se volvieron parte de la instalación de arte.

También recordamos con una sonrisa la instalación “Guardarropa” 2006, que colocamos en la feria entonces llamada MACO en Expo Reforma -frente al Café La Habana en Avenida Morelos-, y cuya documentación devino en videoarte y catálogo del primer 'solo show' de los Tercerunquinto en el Museo Carrillo Gil, en 2008. “Guardarropa” se trataba de ocupar el espacio comercial del stand nina menocal para dar un servicio público. Hicimos maquetas, fuimos juntos a comprar madera. Íbamos a guardar la ropa de todo el mundo: los curadores, los amigos, los coleccionistas y los Terceros se turnarían para cuidar el espacio, todo vigilado y todo cobrado. Aunque en el lobby de la feria comercial había otro guardarropa gratis, mucha gente prefirió "Guardarropa", firmado por Tercerunquinto.

En ese entonces los Terceros eran tres; hoy parece que se salió Julio del colectivo y los Terceros, que son dos, trabajan en otra galería que les vende su obra muy bien.

A Mac: La verdad verdad me gustó mucho la expo de Monumentos y Antimonumentos, una provocación divertida con algunas joyas. Las fotos de la investigación de Helen Escobedo, la obra de Pablo Helguera, el video de la Ruta de la Amistad de Raquel Welch bailando entre esculturas. También el pedestal vacío –monumento sin héroe- del colombiano Juan Fernando Herrán y las fotografías del artista también colombiano, Iván Argote, que muestran las estatuas de Isabel I de Castilla y Cristóbal Colon, revestidas con ponchos tradicionales. ¿Y la curaduría? -Creo que esas obras en diálogo concretizan la postura curatorial y tienen el mejor tiro museográfico, afirmó la Coordinadora Nacional de Artes Visuales del INBA.

Yo: Me demoré un rato en pensar cuál es mi postura y en escribir el blog, tuve en el inter un viaje a Miami de dos días y luego un evento en casa para coleccionistas en honor del artista José Bedia y del Museo Dolores Olmedo. Pero hoy tengo un tiempo y aquí estoy en mi oficina nueva de Las Lomas de Chapultepec desde cuya ventana (en el tercer piso) veo techos de casonas entre árboles y un horizonte de cerros que rodean el Valle de México. Recuerdo el pasado, ya que en el negocio del arte se recurre bastante a la amnesia.

La verdad mía es que aunque la exhibición del Chopo tuvo algunas piezas interesantes (añado a la lista de Mac el fanzine La Ruta de la Enemistad de Abraham Cruzvillegas), la curaduría de Pablo León de la Barra me pareció francamente frívola y fatua, como fue la última que le vi, la pieza de Carlos Amorales en la Bienal de Venecia de 2017.

No se puede abarcar el tema de Monumentos y Anti-monumentos y Nueva Escultura Pública así como así, sin explicar el objetivo de la exhibición. ¿Educacional? No, porque las obras no tenían narrativa coherente, estaban como islas sin crítica seria. Se escriben libros y teorías sobre la escultura posmoderna y contemporánea con sus constantes cambios y contrastes, existe lo que brilla por costoso y glamur (Jeff Koons balloons), y lo sencillo, acumulativo, de bajo costo de producción, justo como lo que hace Perla Krauze.

Esta exhibición no era investigativa, faltaron por ejemplo monumentos arquitectónicos contemporáneos como los de Zaha Hadid que se transforman en iconos de las ciudades y siguen siendo monumentos: el Hoenheim-North Terminus & Parqueo (Estrasburgo, Francia), la plataforma de saltos de esquí Bergisel (Innsbruck, Austria) o el Anexo Ordrupgaard (Copenhague, Dinamarca), entre muchos.

En cuanto a monumentos en las plazas públicas del siglo XIX fueron cambiando para convertirse en esculturas públicas de valor artístico cultural y arquitectónico, y luego en anti-monumentos, la negación o crítica del monumento, y luego a Nueva Escultura Pública que es como “el no lugar” pero mucho más “cool”. ¿Era el de Pablo León de la Barra una lectura sobre lo anterior? Más bien piezas colocadas ahí en el galerón de curva inclinada del Museo del Chopo.

Quizá el curador ha cambiado mucho. Hace 25 años estaba en la Ibero estudiando arquitectura, sus compañeros lo recuerdan con huaraches, sencillo y relajado. –Reapareció transformado en otro personaje, arrogante y vestido muy fashion, comentan. 

Yo no lo conozco, solo de hello, how are you? León de la Barra tiene su mérito. Hoy curador del museo Guggenheim UBS MAP para América Latina y curador en jefe del Museo de Arte Contemporáneo De Niteroí, Brasil, quizás sea producto de la desubicación actual del arte, de sus tiempos de confusión. Este curador da la impresión de snob, interesado en galerías poderosas, famosas y de moda; es decir,  galerías “Monumentales”.

Perla Krauze: La de Tercerunquinto, porque si

Mac Zavala: una provocación divertida con algunas joyas

La Ruta de la Enemistad de Abraham Cruzvillegas: Esta es la peor arquitectura que encontró Felipe Ehremberg en la Ciudad de México

Tercerunquinto derribando un muro del Instituto Cultural de México en Miami, 2002

¨Guardarropa¨, firmado Tercerunquinto, para el stand de nina menocal en MACO, 2006

Monumento sin héroe- del colombiano Juan Fernando Herrán, exhibida antes del Chopo en el Amparo de Puebla